El programa de la Unión Europea, EL PAcCTO, ha organizado un webinario destinado a las fuerzas de seguridad los países miembros del “canal policial COVID” el pasado 12 de mayo. Algunos de los objetivos más relevantes han sido el intercambiar buenas prácticas, conocer las problemáticas de los diferentes países y definir posibles ejes de trabajo comunes para enfrentar los nuevos desafíos post COVID.
Han participado 54 representantes de las fuerzas de seguridad de 17 países de América Latina y Europa.
Desde Europa intervinieron el coronel de la Guardia Civil de España, Juan Manuel Molina Chamorro, coordinador del canal COVID de EL PAcCTO, el Sr Joaquín Pereira, director de la Unidad de Cooperación Internacional de la Policía Judicial de Portugal y el mayor Georges Lopez de la Gendarmería Nacional francesa.
El general de la Guardia Civil, José Manuel Santiago, inauguró el webinario subrayando que el personal administrativo de la Guardia Civil ha tenido que unirse a los equipos en terreno para enfrentar la crisis sanitaria. El general Santiago está a cargo de la célula de coordinación de la Guardia Civil y es su portavoz ante el Gobierno y la ciudadanía española.
EL PAcCTO creó el “canal policial COVID” a principios del mes de abril con el objetivo de intercambiar lecciones aprendidas para enfrentar la pandemia entre Latinoamérica y Europa.
Los delitos durante la crisis sanitaria
Algunas de las conclusiones que expusieron los participantes del webinario se resumen en:
- Se ha notado una reducción importante en el número de homicidios y delitos contra la propiedad.
- Incremento notable de la violencia doméstica.
- Aumento de la cibercriminalidad y nuevos modos de actuar. En Portugal, por ejemplo, el cibercrimen ha aumentado un 100 por cien.
- En España han aumentado los delitos de pornografía infantil y trata de seres humanos.
- Disminución de la entrega de droga proveniente del extranjero y aumento de los precios. En Portugal, por ejemplo, la reducción del tráfico de drogas se aproxima al 55%.
- En algunos países de América Latina se han producidos saqueos de comercios para conseguir dinero en efectivo. Menor es el número de robos por motivos alimenticios. No obstante, hay varios casos de robos de contenedores con carne y otros productos alimenticios.
Adaptaciones a la “nueva criminalidad” y a la situación COVID
Para adaptarse a esta “nueva normalidad” y “nueva criminalidad” las fuerzas de seguridad han reforzado algunas medidas para evitar la transmisión de la COVID-19 entre los efectivos policiales.
Por ejemplo, en España, la Guardia Civil ha creado un sistema de división de equipos para disminuir las bajas por infección (los equipos se dividían en dos y se turnaban, si un equipo estaba infectado el restante se volvía a dividir). También se ha procedido a la desinfección de oficinas, vehículos, material, etc.
En Portugal, las medidas para enfrentar la pandemia se tomaron a principios de marzo, cuando el virus estaba entrando en Europa.
Por otra parte, la Gendarmería Nacional francesa ha favorecido el intercambio de información a través de redes operativas para luchar contra el cibercrimen.
Un punto a tener en cuenta por la mayoría de países es el teletrabajo. Las computadoras personales están menos protegidas que las de las empresas, lo que favorece la implementación de “trojan”. Se necesitan campañas de prevención para evitar la contaminación de las redes informáticas de las empresas o infraestructuras.
El desconfinamiento / la desescalada
¿Qué rol van a jugar los cuerpos de seguridad en esta etapa? En muchos casos la institución decisoria es el Ministerio de Sanidad en consulta con otras instituciones del Estado, entre las que se incluyen las fuerzas y cuerpos de seguridad.
La Guardia Civil en España en la etapa de desconfinamiento, se involucra en:
- Control de flujo entre regiones y provincias.
- Control de fronteras.
- Control de actividades no autorizadas dentro de las provincias.
- “Catorcena” a la llegada desde el extranjero.
- Obligaciones al tomar transporte público y privado (uso de máscaras, distancias, etc.), control de las reuniones de gente.
En América Latina las fuerzas de seguridad prevén un aumento del número de robos por la precaria situación social de algunos colectivos que están, por ejemplo, en desempleo.
Otras preocupaciones son:
- Cambio en la situación del tráfico de drogas: nuevas rutas, precios más altos, mayo conflicto, nuevos medios de tráfico (Uber, por ejemplo)
- Aumento de la minería ilegal por la seguridad económica que da el oro.
- Un ambiente favorable a los delitos en el ámbito sanitario (fraudes abastecimiento).
En Europa se espera también un aumento de denuncias por violencia de género.
Además, Portugal se enfrenta a los desafíos en el respeto de uso de mascarilla obligatorios y el distanciamiento social dentro de las oficinas.
Como gran conclusión del webinario podemos apuntar a que la crisis sanitaria podrá generar, según los países participantes, una crisis política, una crisis económica y una crisis social para las cuales las fuerzas de seguridad se deben preparar.