Tráfico de bienes culturales: el negocio del crimen organizado

En el ámbito latinoamericano, el patrimonio cultural constituye un objeto de particular interés en los distintos Estados por su importante efecto identitario. Los atentados contra los bienes alcanzan rápidamente un efecto mediático en toda la región. Las agresiones sobre yacimientos arqueológicos son realizadas por expoliadores que en Perú, Colombia, Bolivia y Ecuador se denominan huaqueros.

El saqueo de bienes eclesiásticos perpetrados entre los siglos XVI y XIX para su exportación, y de manera particular desde mitad del siglo XX, determina que, casi sin excepciones, se sancionen determinadas formas de prevención del tráfico ilícito. Sobre esta materia tan sensible, el programa EL PAcCTO ha publicado una guía sobre la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales, titulada «Diagnóstico de la situación y de las herramientas existentes en la lucha contra los delitos de tráfico ilícito de bienes culturales».