Apoyo de Europol en una operación internacional única contra el comercio ilegal de madera tanto en los países de origen como en los de destino. Han participado autoridades policiales de Brasil, Francia, Italia, Países Bajos, Portugal y España, así como el programa europeo EL PAcCTO. Las acciones se centraron en las redes implicadas en delitos contra el medioambiente, la tala ilegal, el contrabando, la evasión fiscal, el blanqueo de capitales y la falsificación de documentos.
En las jornadas de acción conjunta que se llevaron a cabo en septiembre se realizaron más de 350 inspecciones. Los investigadores detectaron irregularidades en relación con 17 empresas (una en Italia, una en los Países Bajos, tres en España y 12 en Portugal). Las autoridades competentes abrieron un procedimiento penal contra una de estas empresas. Las autoridades nacionales realizaron los controles principalmente en los puertos brasileños para la exportación y en los europeos en busca de importaciones ilegales. Las redes delictivas recurren a la falsificación de documentos para disimular el origen de la madera o la especie real del envío con el objetivo de superar los controles aduaneros y llegar a los consumidores. La corrupción también es un factor que favorece esta actividad delictiva.
El comercio ilegal de madera afecta al cambio climático
Es la primera vez que los países de origen y de destino afectados por el comercio ilegal de madera unen sus fuerzas en una inspección coordinada de los países que comercian con madera. Las inspecciones se centraron en las diferentes actividades ilícitas que llevan a cabo las redes delictivas para posibilitar el comercio ilegal de madera, incluidos la falsificación de documentos y el soborno, con el fin de ocultar el origen o la especie real de las mercancías. La madera se utiliza para muchos fines, como la construcción o la creación de adornos, mientras que su raro origen es apreciado por sus características naturales. Los beneficios obtenidos no se gravan, lo que conduce a la evasión fiscal. Las redes delictivas blanquean estos beneficios ilegales colocándolos en el sistema financiero legal y, por tanto, integrándolos en la economía legítima. Sin embargo, el comercio ilegal contribuye de manera significativa a la deforestación actual en los países de origen, agotando sus recursos naturales. Según el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales de Brasil, la deforestación de la Amazonia brasileña aumentó al menos un 28 % en 2020.
Europol coordinó las actividades operativas, facilitó el intercambio de información y prestó apoyo en materia de análisis. Durante las jornadas en las que se llevaron a cabo las acciones, Europol envió expertos a los Países Bajos para que brindaran apoyo en las actividades sobre el terreno. Esto permitió a Europol intercambiar información en tiempo real y brindar asistencia a través de análisis operativos que proporcionaron pistas a los investigadores sobre el terreno.